Infinito

Y muchos queridos lectores se convertirán, a su vez, en escritores. Así empezamos todos los que escribimos: leyendo. Oíamos la voz de un libro que nos hablaba.
El cuento de la criada, introducción. Margaret Atwood.
Qué conste que a mí ningún libro en particular me habló. Supongo que me gustaba la idea de cultivar el arte de no hacer «nada»..

