Invocación
Podemos muy bien imaginar que la maravilla de la vida está al alcance de cada uno, siempre disponible en su completa abundancia, pero camuflada en algún lugar, en el fondo, invisible y muy lejana. Pero ella queda allá, sin estar hostil, disgustada o sorda. Si la invocamos usando la palabra apropiada y la llamamos por su nombre, viene. Esta es la esencia de la magia, que no es creación, sino invocación.
(Franz Kafka, Diario)