Cómo escribir ficción

Contactos cercanos del tercer tipo y personajes que cobran vida y lo echan todo a perder…

Escribir como estilo de vida

«Primero, piensa en algunos individuos reales con los que hayas interactuando hoy (mesera, guarda abrigos, lava autos, etc.) y colócalos en una escena con uno de tus personajes. ¿Cómo interactúan estos individuos? ¿De qué hablan? Nunca sabes cuándo uno de estos «contactos menores» tendrá un gran impacto en un personaje más importante»

Sarah Domet. 90 days to your novel. Día 7



Cómo cuando a uno de mis personajes menores se le ocurrió tener celos y, mientras yo quería meter a un profe aburrido explicando el trasfondo de algo, ella brincó de la página y metió en problemas a mi personaje de apoyo más importante, acusándola de no saber la lección en un medio ambiente dónde no saberla era equivalente a morir por hereje.

No podía borrar su intervención porque era real, sincera y vívida.  Prácticamente, borrarla hubiera sido destruir la historia —medianamente buena para una opera prima. No tenía idea como sacar del lío al personaje de apoyo, lo que  definió el “cómo” llegué al final al que debía llegar y eliminó muchas escenas bastante malas… Así que nunca trates a un personaje menor como a una mosca molesta. Son las alas de la mariposa[1]. Merecen que escuches todo lo que dicen y les des un poco de tu tiempo imaginándolos.

Déjalos brincar y hacer travesuras por toda la página. Seguro te dejarán caer una o dos bombas H por ahí y tendrás que hacer un buen trabajo para salvar al mundo.


[1] Por aquello del efecto mariposa…donde las alas de una mariposa crean ondas que afectan cualquier episodio futuro.

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